En el corazón de la navidad, no hay regalo más valioso que la esperanza y el amor compartido. En Boavita, 50 pequeños corazones, llenos de sueños y deseos, esperan una oportunidad para vivir una de las Navidades más especiales de sus vidas.
Nuestra Fundación Padre Luis Carlos Mendoza te invita a ser el ángel de la guarda del programa «Gracias de Verdad». Este no es solo un programa; es un puente de ternura que conecta a dos generaciones que se necesitan: la inocencia de la niñez y la sabiduría de la vejez.
¡Dos generaciones un mismo espíritu navideño!
«Gracias de Verdad» es el dulce abrazo que unirá a cincuenta de nuestros niños y niñas de Boavita (entre 6 y 11 años) con los abuelos del Hogar de Nuestra Señora de la Estrella. Juntos, vivirán una experiencia que acariciará el alma y sembrará luz en nuestra comunidad.

¡Manos pequeñas creaciones gigantes!
Nuestros niños y niñas se convertirán en pequeños artesanos. Guiados por manos expertas, realizarán hermosas manualidades navideñas. Estas creaciones no solo decorarán sus propios hogares, llenándolos de orgullo y alegría, sino que también embellecerán el árbol de Navidad del Ancianato de Boavita, llevando color y calor a nuestros abuelos.

¡El eco tierno de la novena!
Nuestros niños ensayarán y aprenderán los villancicos más dulces y tradicionales. Su voz se convertirá en un coro de ángeles que, con profundo respeto y cariño, irán a cantar junto con los abuelos la Novena de Navidad.
Un encuentro de dos generaciones
Este encuentro será un milagro de amor: los niños ofrecerán su energía y alegría, y los abuelos, su experiencia y cariño. Será un momento profundamente espiritual y emotivo, donde se reavivará la fe y el sentido de la familia en la comunidad.
¡Ya tenemos para estos niños!
¿Por qué tu donación es indispensable?
Tu apoyo es el hilo dorado y el gesto de amor que hará realidad este tierno encuentro de almas. Cada aporte económico cubre los detalles con profundo cariño: nos permite conseguir los materiales para que las manos pequeñas creen hermosas manualidades; nos ayuda a organizar una cálida merienda para celebrar la alegría compartida; y asegura entregar un detalle de recuerdo para cada niño, como símbolo de su valiosa y hermosa labor social y espiritual.
